Autos seguidos por Antonio González Pantoja, promotor fiscal de la visita eclesiástica, contra Fernando de Cuevas, por estar amancebado con María Magdalena, viuda.
Autos seguidos por Antonio González Pantoja, promotor fiscal de la visita eclesiástica, contra don Gaspar de Medrano, vecino de la ciudad de Huánuco, e Isabel, india soltera natural del pueblo de Margos, por estar amancebados por más de veinte años, teniendo cuatro hijos con ella.
Autos seguidos por Antonio González Pantoja, promotor fiscal de la visita eclesiástica, contra Pedro de Montemayor, labrador, natural de Arequipa, quien es casado en ella con Francisca de Cea, por estar amancebado con una india llamada Juana. Incluye sentencia.
Autos seguidos por Antonio González Pantoja, promotor fiscal de la visita, contra Francisco Díaz, mercader, y María Ñusta, india soltera, quienes llevan más de 8 años amancebados públicamente, tratándose como si fuesen marido y mujer, con mucha nota y escándalo, y tienen una hija.
Autos seguidos por Antonio Rodríguez de la Cruz, presbítero, fiscal del arzobispado de Lima, contra Juan Bautista de Quiñoñes, maestro de sastre, y Veneciana de Solís, por estar amancebados ha más tiempo de ocho años, teniendo dos hijos.
Autos seguidos por Pedro González, presbítero, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Francisco de Quiñones, maestro carpintero, natural de la provincia de San Vicente de la Barquera, en Burgos, y residente en Lima, y Constanza Rodríguez, mestiza, por estar amancebados por muchos años, teniendo ambos un hijo.
Autos seguidos por Juan Hurtado de Vera, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Sebastián Félix Gómez, alguacil mayor de la villa de Chancay, por estar públicamente amancebado con Florentina Catalán, soltera, con la que tiene dos hijos. Incluye sentencia.
Autos seguidos por el doctor Feliciano de Vega, provisor y vicario general del arzobispado de Lima, contra Diego Matías, por estar amancebado con una mujer casada, de la cual no se expresó su nombre.
Autos seguidos por Francisco de Aguilar, alguacil del juzgado eclesiástico, contra Antonio Pérez, clérigo de menores órdenes, y Margarita Gutiérrez, por estar amancebados por más de dos años, por lo cual hay mucho escándalo en todo el barrio de Santa Ana.
Autos seguidos por el doctor Feliciano de Vega, provisor y vicario general del arzobispado de Lima, contra Manuel de Abrego, molinero, por estar amancebado con una morena libre llamada María de Zárate.
Autos seguidos por Pedro González de Saavedra, presbítero, fiscal del arzobispado de Lima, contra María de Escobar y José Ruiz, carpintero, moradores en esta ciudad, por estar amancebados. Incluye sentencia.
Autos seguidos por el bachiller Juan Jiménez Domínguez, fiscal del arzobispado de Lima, contra Juan Delgadillo, residente en Canta, y Catalina Gitana, indios del pueblo de San Buenaventura, en el sitio de Cochacay, por estar amancebados reincidentes.
Fragmento de los autos seguidos por Francisco de Aguilar, alguacil del arzobispado de Lima, contra Jerónimo de Antezana y doña Juana Delgado, por estar amancebados.
Autos seguidos por Francisco Aguilar, alguacil del arzobispado de Lima, contra don Miguel de Ávila y doña Antonia de Escobar, por estar amancebados.
Autos seguidos por Antonio de Zúñiga contra su hijo el bachiller José de Zúñiga, clérigo de menores órdenes, por estar amancebado con una mujer casada y haber injuriado palabras “malsonantes y descompuestas” públicamente a su padre.
Autos seguidos por Juan Bautista de Alfaro, fiscal de la visita, en los que se querella criminalmente contra don Juan Auca Ñaupa, indio del pueblo de Santa María de Jesús de Huarochirí, cacique del ayllo de Guarochirí, y contra Isabel Chumbi Cuti, viuda de don Juan Casta Guaman, también natural del mismo pueblo, del ayllo Sangayalla, quienes están públicamente amancebados por más de diez o doce años, viviendo en una casa, comiendo y durmiendo juntos, como si estuviesen legítimamente casados. Incluye sentencia. El acusado es casado con una india del pueblo que huyó ha más de diez años por la mala vida que le daba.
Denuncia criminal que interpone Francisco de Torres, alguacil del arzobispado de Lima, contra Juan Infante, a quien se le acusa de estar amancebado y en pecado público con una mujer casada por muchos años, viviendo como si fueran casados.
Autos seguidos por Vicente Pablo, alguacil del juzgado eclesiástico, contra Juan de Sifuentes, mercader residente en Lima, por estar amancebado con una mujer casada.
Autos seguidos por el doctor don Pedro de Villagómez, arzobispo de Lima, contra Juan de Salinas, quien estando casado en Lima con Luisa de Acevedo, su legítima mujer, viviendo apartado de ella, sin hacer vida maridable, y está mal amistado con una mujer casada desde hace mucho tiempo.
Autos seguidos por don Pedro de Espina Fernández de Velasco, caballero del orden de Santiago, visitador general y juez eclesiástico del arzobispado de Lima, contra don Francisco Guerrero, residente en el pueblo de Atunjauja, quien está mal amistado públicamente con una india llamada Francisca desde hace dos años.
Autos seguidos por el doctor don Pedro de Villagómez, arzobispo de Lima, contra Nicolás Lozano, residente en el valle de la Nazca, quien está amancebado mucho tiempo ha con doña Catalina Pulido.
Autos seguidos por el bachiller Antonio de Tejeda, promotor fiscal del arzobispado de Lima, quien se querella criminalmente contra Cristóbal de Fuentes, mayordomo de una chacra que tiene arrendada en el valle de Huachipa, casado con doña Francisca de Soria, con la cual no hace vida maridable ha más de diez años, viviendo en mal estado con otras mujeres y, en especial, viviendo amancebado con una cuarterona de mulata llamada Agustina, la misma que tiene consigo en la mencionada chacra, en la cual tiene un hijo.
Autos remitidos por el licenciado don Bernardo Barreto de Figueroa, cura y vicario del pueblo de Huarochirí, para que se dicte sentencia contra don Diego Carua Julca, alcalde, quien lo acusó de no tener autoridad para casar a los indios del pueblo y, por lo tanto, estar nulos dichos matrimonios y seguir en la condición de amancebados.
Autos seguidos por el bachiller don Antonio de Medrano, promotor fiscal de la visita general del arzobispado de Lima, contra Juan de Robles, mestizo residente en el pueblo de Huari, el cual está públicamente amancebado por más de seis años con una india llamada Francisca, a la que trajo de la provincia de Huaylas; y también con otra india llamada Juana Guasac, en quien tiene hijos.
Autos seguidos por el bachiller Antonio de Medrano, promotor fiscal de la visita general del arzobispado de Lima, contra Ginés del Arco, casado, el cual está públicamente amancebado con Beatriz, india, a quien tiene en su estancia.
Autos seguidos por el bachiller don Antonio de Medrano, fiscal de la visita general del arzobispado de Lima, contra Juan González, español residente en el pueblo de Cajatambo, el cual ha muchos años que está amancebado públicamente con una mujer casada.
Auto emitido por el licenciado don Diego de Sarzosa, visitador general eclesiástico del arzobispado de Lima, por encargo del Arzobispo de Lima, ordenando a Juan de Soto Cornejo, escribano público y de cabildo de los valles de la Nazca, que efectúe una memoria jurada de todas las causas de amancebamiento que se han hecho antes de él, desde que Juan de Miranda Santander entró a usar el oficio de teniente general de los dichos valles, incluyendo todas ellas, tanto las que estuvieren sentenciadas como las que están por sentenciar.
Autos seguidos por el licenciado don Diego de Zarzosa, visitador general del arzobispado de Lima, contra Pedro de León, quien está amancebado con una mulata llamada Estefanía durante muchos años. Incluye sentencia.
Autos seguidos por José Ruiz, fiscal de la visita eclesiástica, contra Esteban Bravo y María de Porras, soltera, por estar amancebados.
Autos seguidos por Nicolás de Molina, fiscal de la visita eclesiástica, contra Diego Ortiz de Cervantes, notario del juzgado eclesiástico, por estar amancebado por más de veinte años con Ana María de Cervantes, quien “anda en hábito de india”, con quien tiene tres hijos y tres se le han muerto.
Autos seguidos por Nicolás de Molina, fiscal de la visita eclesiástica, contra Juan de Porras, casado en Lima, y Ana de Rivera, moradora en este pueblo; Jerónimo de Chávez y Leonor; y contra Hernando Bravo, mestizo, y Juana Pascuala, india, por estar amancebados.
.Autos seguidos por el bachiller Antonio Ortiz, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Ignacio de Céspedes, vecino de la villa de Pisco, y doña Marcela Hurtado, por estar amancebados.
Autos seguidos por el bachiller Francisco Cabezas Solano, vicario y juez eclesiástico del arzobispado de Lima, contra Tomás Pérez de Valenzuela, hacendado en el valle del Ingenio, por estar amancebado con una mujer casada, con la que tiene hijos.
Testimonio de arrepentimiento hecho por Alonso Julca Condor, a quien se le acusó de estar amancebado con María Canchan, india.
Autos seguidos por Tomás de Ayala, cura de la doctrina de Recuay, contra Pedro Osorio, mestizo natural de Huaraz, por estar amancebado con Juana Gregoria, mestiza, con quien tiene cuatro hijos. Ella confiesa haber tenido cópula carnal con un hermano legítimo de Osorio, lo cual estorba el matrimonio que pretenden contraer los acusados.
Denuncia anónima remitida al contador Gaspar Ochoa, sobre el amancebamiento que mantienen José de Céspedes y Catalina por más de un año.
Autos seguidos por Agustín Capcha, fiscal mayor, contra Juan de Ventosilla y María Dominga de Ugalde, mestiza del pueblo de Gorgor, por estar amancebados.
Autos seguidos por el doctor don José de Lara Galán, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra el bachiller José Pedrero, que viste el hábito clerical de San Pedro, y doña María de Acuña, por estar amancebados.
Fragmento de los autos seguidos contra Pablo Galarza, casado con Juana de Orozco, por estar amancebado con Dominga Soto.
Autos que sigue Bruno Valenzuela, indio contribuyente de la villa de Tarma y residente en Lima, contra Francisca Romualda, su mujer legítima, quien lo ha abandonado para vivir en adulterio con Manuel Coronguino. Incluye certificado de matrimonio firmado por el cura de Ate.
Informe de José Belsunce, alcalde de la estancia de Huacracocha, contra Julián Pizarro y Bernarda Montero, por haber estado amancebados y luego casarse siendo primos hermanos.
Solicitudes de José Portocarrero y Catalina Ramírez, india, para poder casarse, ya que habían tenido anteriormente un proceso por estar amancebados.
Autos seguidos por el licenciado Miguel de Salinas, provisor y vicario general del arzobispado de Lima, contra Sancho Dávila, morador en esta ciudad, quien se encuentra amancebado con Francisca de Landero, india.
San Francisco de Ihuari. Autos seguidos por el maestro Pedro Pareja, juez eclesiástico, contra Pablo Ticsihuari, curaca casado con doña Ana Caja, quien se amancebó con una india llamada Catalina, del pueblo de Santa Cruz, difunta; y luego lo hizo con Leonor, india del pueblo de San Juan de Guachinga.Incluye sentencia.
Autos seguidos por Francisco de los Ríos, presbítero, promotor fiscal del arzobispado, contra Valentín de León y doña Isabel Venegas, soltera, residente en Lima, por estar amancebados.
Autos seguidos por Fernando Manrique, clérigo diácono, promotor fiscal de la visita general, contra Melchor de Cíntar y Catalina González, pulpera, por estar amancebados y tenerla preñada, con gran nota y escándalo en la vecindad.Incluye sentencia.
Autos seguidos por Fernando Manrique, clérigo diácono, promotor fiscal de la visita general, contra Lorente Marín, natural de Medinasidonia, en España, y Luisa de Esquivel, por estar amancebados por más de seis años; y aunque han sido presos y castigados por este delito, le han reiterado infinitas veces.
Autos seguidos por Fernando Manrique, clérigo diácono, promotor fiscal eclesiástico de la visita general, contra Francisco Ortiz, carpintero, quien se encuentra amancebado con una mujer casada, por lo que no se expresó su nombre.
Autos seguidos por Pedro Martín, oficial de sastre, residente en Lima y natural del pueblo de Chiclayo, contra Sebastián Moreno, español, chacarero que reside en la chacra de San Agustín, junto al tambillo del camino del Callao, por estar amancebado con Isabel, india natural de Lampa, quien es pariente del dicho Pedro, a la cual tiene encerrada y escondida en el tambillo de su chacra.Incluye sentencia.
Autos seguidos por Fernando Manrique, clérigo diácono, promotor fiscal de la visita general, contra Martín del Pozo, sombrerero sedero, y Mariana, mestiza de Arequipa, por estar amancebados.Incluye sentencia.
Autos seguidos por Francisco de los Ríos, presbítero, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra los mulatos Juan de Jerez y María de Fuentes, por estar amancebados y ser reincidentes. Incluye autos de 1595 y 1597, seguidos por Pedro Ordóñez Castañón, alguacil de la audiencia arzobispal.
Autos seguidos por Fernando Manrique, fiscal eclesiástico de la visita general, contra Lope de Herrera, arriero, y María, india, por estar amancebados. Incluye probanza de testigos.
Autos seguidos por Francisco de los Ríos, presbítero, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Alonso Rico, chacarero casado en Castilla, y doña Luisa del Águila por estar amancebados
Autos seguidos por Antonio de Castro, alguacil del juzgado eclesiástico del arzobispado de Lima, quien denunció criminalmente a Juan de Bocanegra, español, y a Melchora de los Reyes, mulata, por estar públicamente amancebados por muchos años. Incluye sentencia.
Autos seguidos por el doctor Feliciano de Vega, canónigo, provisor y vicario general del arzobispado de Lima, contra Juan de Nova, clérigo de menores órdenes, por estar amancebado con Isabel Guillén, desde el tiempo en que el marido de la susodicha, Diego de Bustamante, estaba vivo.
Autos seguidos por Francisco de los Ríos, presbítero fiscal del arzobispado de Lima, contra Juan Ortiz por estar amancebado con una mujer casada, de quien no se expresó el nombre.Incluye sentencia.
Autos seguidos por Francisco Hermoso, promotor fiscal del juzgado eclesiástico, contra Francisco Núñez, mercader, morador en Lima, por estar amancebado con una mujer casada, de la cual no se expresó el nombre.
Autos seguidos por Baltasar de Mota, fiscal eclesiástico, quien denuncia civil y criminalmente a don Francisco, segunda persona de todo el valle de Jauja, por estar amancebado por tres años con una india llamada Antonia, natural de Orcotuna, y tener hijos en ella.
Autos seguidos por Francisco de los Ríos, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Juan Bautista Muñoz, alguacil de corte, por estar amancebado por más de cinco años con una mujer casada, que por serlo no se expresó su nombre.
Autos seguidos por Francisco de los Ríos, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Diego de Castro, residente en Lima, tratante en los valles, y Juana, india natural de Trujillo, de donde la trajo, por estar amancebados.Incluye sentencia.
Autos seguidos por Blas de Escobar, presbítero, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Melchor de los Reyes de León y María de Santa Cruz, mulata, por estar amancebados.
Autos seguidos por Juan Ramírez de Arellano, promotor fiscal de la visita general eclesiástica, contra Martín Hernández, español residente en el valle de Pachacamac, por estar amancebado con Juana Maldonado, mulata soltera, pecado en el que han reincidido muchas veces y han sido castigados por el corregidor por ello.
Autos seguidos por Francisco de los Ríos, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Bartolomé Fajardo, espadero residente en Lima, por estar amancebado con una mulata llamada Dorotea, de quien tiene varios hijos.
Autos seguidos por Gregorio Muñoz, fiscal de la visita y juzgado eclesiástico, contra Juan de Borunda, residente en el obraje de Chuquibamba, por estar amancebado con María, india natural del pueblo de Chachapoyas y residente también en dicho obraje por más de seis años.
Autos seguidos por Antonio de Castro, alguacil del juzgado eclesiástico, contra Santiago de Lizárraga, vizcaíno, por estar amancebado con María Bran, esclava
Autos seguidos por Francisco de los Ríos, presbítero, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Alonso de Mesa, pulpero, por estar amancebado con una mujer casada y haber procurado matar al marido para quedarse con ella. Incluye probanza de testigos.
Autos seguidos por Antonio González Pantoja, promotor fiscal de la visita eclesiástica, contra Francisco Tisiato, gobernador del repartimiento de Pacaraos, por estar amancebado con María Choque, india soltera natural del pueblo de Raura, teniendo con ella un hijo. A él se le acusa también de maltratar a su mujer legítima de palabra y de obra.
Autos seguidos por Antonio González Pantoja, promotor fiscal de la visita eclesiástica, contra Manuel Rodríguez, portugués, residente en el pueblo de los Baños, por estar amancebado por más tiempo de cuatro años con una india soltera natural del mismo pueblo llamada Esperanza.
Autos seguidos por Francisco de los Ríos, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Felipe de Aponte, chacarero, y Juana López, mulata que tiene su pulpería en la calle de Malambo, por estar amancebados.
Autos seguidos por Antonio Rodríguez de la Cruz, presbítero fiscal del arzobispado de Lima, contra Juan Becerra, natural de Lima, y Lucía Fajardo, mulata, por estar amancebados. Incluye sentencia.
Autos seguidos por el doctor Juan Hurtado de Vera, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Juan Sánchez, hombre casado, y María Ayllón, negra criolla, por estar amancebados.
Autos seguidos por Antonio Rodríguez de la Cruz, presbítero, fiscal del arzobispado de Lima, contra Andrés Romero, residente en el valle de Casma, por estar amancebado con doña Isabel de Parada, viuda, hacendada en el dicho valle, siendo reincidentes en ello.
Autos seguidos por Bartolomé Jaén, alguacil mayor de la audiencia arzobispal de Lima, contra el clérigo presbítero Esteban Bartolomé de Serpa, por estar amancebado por más tiempo de doce años con una mujer casada, de la cual no se expresó su nombre.
Fragmento de los autos seguidos contra el bachiller don Agustín de Argote, por estar amancebado.
Autos seguidos por Francisco de Aguilar, alguacil del juzgado eclesiástico, contra Sebastián Gómez, almotacén de acequias, y Juana Ramírez, negra esclava de Juan Ramírez, por estar amancebados por más de seis años, teniendo hijos.
Autos seguidos por Jerónimo de Orellana, fiscal eclesiástico de la audiencia arzobispal de Lima, contra Juan Blas, residente en la provincia de Conchucos, por estar amancebado con María Maldonado, quien es hermana legítima de Juana Maldonado, su mujer.
Autos seguidos por Juan Jiménez Domínguez, fiscal del arzobispado de Lima, contra Diego Báez Enríquez y doña Catalina de Morales, vecinos de esta ciudad, por estar amancebados, siendo reincidentes por haber sido castigados antes por la justicia.
Autos seguidos por Juan Jiménez Domínguez, fiscal del arzobispado de Lima, contra Pedro Ortiz de Valdelomar y Agustina de Torres, criolla libre y mujer legítima de Gaspar González, por estar amancebados.
Autos seguidos contra Juan de Aro, oficial del escritorio de Juan Pérez de Valenzuela, escribano público de la ciudad de Lima, por estar mal amistado con una mujer casada.
Autos seguidos por Francisco de Aguilar, alguacil del arzobispado de Lima, contra Juan de Castro, albañil que es casado, por estar amancebado con una negra libre llamada María de Ayllón, dándole muy mala vida a su mujer legítima y obligándola con ello a huir a Panamá.
Autos seguidos por Tomás de la Torre, presbítero, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Francisco Carrillo, chacarero, por estar amancebado por más de ocho años con una mestiza “medio india” llamada Agustina y haber herido al padre Luis de Morales por haber escondido a Agustina, pues estaba huyendo de él.
Autos seguidos por Francisco de Aguilar, alguacil del arzobispado de Lima, contra Hernando Copete, residente en esta ciudad y casado en España, separado de su mujer sin licencia real, por estar amancebado con cierta mujer, de la cual no se sabe el nombre.
Autos seguidos por Pedro González de Saavedra, presbítero, fiscal del arzobispado de Lima, contra Francisco de Espinoza, quien está casado en España y sin atender a las obligaciones de su matrimonio por estar amancebado con Isabel de los Ángeles Escalante, viuda.
Autos seguidos por Alonso Gómez de la Montaña, procurador de la real audiencia, contra Francisco Ortiz de Castro, a fin de que entregue los autos que contienen la información sobre el amancebamiento de Faustina Duarte, negra.
Autos seguidos por el bachiller Gabriel de Alvarado, promotor fiscal del arzobispado de Lima, contra Francisco Frutos y María, india, que han venido de Conchucos, por estar amancebados.
Autos seguidos por el bachiller Gabriel de Alvarado, fiscal eclesiástico del Arzobispado, contra don Juan Bartolomé Matute, natural de Guadalajara, en España, y doña Ana de Villalón, por estar públicamente amancebados desde hace más de tres años.
Autos seguidos por Jerónimo Vásquez de Arancibia contra el licenciado Bartolomé de León y Torre, acusándolo de estar “en mal estado” con una mujer viuda.
Autos de oficio seguidos por el doctor don Pedro de Villagómez, arzobispo de Lima, contra Francisco de Uribe, vecino de dicha ciudad, el cual tiene amistad deshonesta con doña Jerónima de Obando, viuda que vive en los barrios del Carmen. Son reincidentes.
Autos criminales seguidos por el bachiller don Antonio de Medrano, promotor fiscal de la visita general del arzobispado de Lima, contra el gobernador del pueblo de Cajatambo don Jerónimo Julca Chagua, casado, el cual ha más de diez años que está públicamente amancebado con una india llamada María Uramaza, por la cual da mala vida a su mujer legítima.
Autos seguidos contra Francisco de Saldaña, quien fue bodeguero del puerto del Callao y reside en la chacra de La Legua, por estar públicamente amancebado con doña María, cuyo nombre no se sabe, mujer soltera con quien tiene cinco hijos y el mayor tiene de doce a trece años.
Autos seguidos por Cristóbal Romero, promotor fiscal de la visita, contra Francisco de Tejeda, mercader, morador en la villa de Chancay, casado con Francisca de Abarca, quien reside en la villa de Saña, por no hacer vida maridable con ella desde hace más de ocho años y estar amancebado públicamente con Lorenza de Cejas, mujer soltera. Incluye sentencia y una carta escrita por su mujer desde Saña.
Autos seguidos contra el capitán don Pedro Chupica, hermano del gobernador del pueblo de Ihuari, por estar amancebado con una india soltera del pueblo de Oteque, anejo de dicha doctrina, llamada Inés Caxa, dando mala vida a su mujer legítima que tiene en el mismo pueblo.
Autos seguidos por Cristóbal Romero, promotor fiscal de la visita y juez eclesiástico del arzobispado de Lima, contra Alonso Conde, morador en la villa de Arnedo de Chancay, el cual está públicamente amancebado con una mujer soltera llamada María, a la cual llevó desde Lima y suele tenerla en su compañía dentro de su casa.
Autos criminales seguidos por el doctor don Nicolás Martínez Clavero, visitador general del arzobispado de Lima, por acusación hecha por don Juan Soclac, gobernador del pueblo de Huaral, y Juan Marañón, indios ladinos, contra un indio llamado Santiago, quien reside en la chacra de Caqui, en el valle de Aucallama, quien siendo casado no hace vida maridable con su mujer por muchos años por estar amancebado pública y escandalosamente con una india llamada Constanza, viuda, a la cual tiene consigo “de puertas adentro”, comiendo y durmiendo juntos como marido y mujer. También se acusa a dos indias casadas que viven amancebadas en la misma chacra con dos indios casados
Autos seguidos por el doctor don Pedro de Villagómez, arzobispo de Lima, contra Juan de Suero, mestizo, natural del valle de Huambacho y residente en él, quien siendo viudo está amancebado por más de dos años con una zamba o mulata llamada Úrsula de Acevedo, viuda de Juan Chubine, y cuya mala amistad data de antes que enviudase la dicha Úrsula, aunque viven en casas separadas. Incluye sentencia.
Autos seguidos por el doctor don Pedro de Villagómez, arzobispo de Lima, contra Benito Ramírez, morador en el valle de la Nazca, quien está amancebado por más de ocho años con Petronila de Mesa González.
Autos seguidos por don Pedro de Espina Fernández de Velasco, caballero del orden de Santiago, visitador general y juez eclesiástico del arzobispado de Lima, contra Francisco Pérez, residente en el pueblo de Atunjauja, quien está amancebado públicamente con una india coja, en quien tiene dos hijos.
Autos seguidos por Diego de Mondragón, fiscal de la visita general del arzobispado de Lima, contra Francisco Jara, mestizo, el cual está públicamente amancebado con una mulata libre llamada Miliana, con quien ha más de cuatro años que trata, dejando a su mujer y sus hijos desamparados; y aunque se le han hecho muchas causas, no ha querido apartarse de su mal estado y ha reincidido en él. Incluye sentencia.
Autos seguidos por Diego de Mondragón, fiscal de la visita arzobispal, contra Juan Gamboa, mestizo, y Ana Tucto, india natural del pueblo de San Jerónimo, por estar amancebados.
Autos seguidos por Diego de Mondragón, fiscal de la visita general del arzobispado de Lima, contra don Andrés de Montero, español residente en la provincia de Huaylas, y contra Micaela, india natural del pueblo de Guata, los cuales ha muchos años que están amancebados públicamente, tienen hijos y la lleva consigo de pueblo en pueblo como si fuera su mujer legítima.